Las provincias temen un impacto fiscal y cuestionan la unilateralidad del anuncio
La propuesta del ministro de Economía Luis Caputo para reformar la distribución del IVA encendió la alarma entre los gobernadores, que ahora exigen precisiones sobre el esquema que podría impactar directamente en sus cuentas públicas. El funcionario planteó que la Nación se quedaría con el 9% del actual 21% de alícuota y que las provincias establecerían de forma autónoma su parte restante, fomentando así la «competencia tributaria» entre jurisdicciones. Sin embargo, las autoridades provinciales advirtieron que no se conocen aún los detalles técnicos ni los posibles efectos sobre sus recursos fiscales.
Desde Santa Fe, el ministro de Economía Pablo Olivares comparó la propuesta con «una serie que todavía se está rodando», aludiendo a la falta de información concreta. Si bien respaldó la necesidad de simplificar el sistema tributario y reducir la carga impositiva, subrayó que cualquier modificación debe ser sostenible en el tiempo y fruto de un consenso federal. Por su parte, el chaqueño Alejandro Abraam también reclamó mayor claridad y sostuvo que el problema de la informalidad económica podría dificultar la aplicación de un modelo tan abierto. «Falta reglamentación y definición», expresó.
Pablo López, titular de Economía bonaerense, fue aún más crítico. Consideró que es difícil opinar sobre una idea sin desarrollo oficial y cuestionó el enfoque del Gobierno nacional, al que acusó de tomar decisiones unilaterales que afectan a provincias y municipios. Según el funcionario, la discusión sobre el IVA se presenta como una simplificación de un debate complejo que incluye otros tributos, como el impuesto al cheque o los ingresos brutos, y que merecería un tratamiento integral. «La forma en que se plantea no ayuda a un verdadero federalismo fiscal», sostuvo.
Además del esquema de distribución, las provincias quieren saber si la recaudación se asignará según el lugar de origen o el de destino del consumo, una variable clave para su planificación financiera. También hay dudas sobre si esta reforma será limitada al IVA o si Nación impulsará más cambios tributarios. Algunos mandatarios advirtieron que si las provincias deben resignar ingresos, el Estado nacional también debería hacer lo propio para mantener el equilibrio. Mientras tanto, la propuesta de Caputo sigue generando ruido político y expectativa en los despachos provinciales.